jueves, 31 de mayo de 2007

HOMBRES TORNASOLES

¿Mamá cómo se ven, huelen, saben, palpan los hombres y de qué hablan cuando nadie los escucha? “Nosotros los que conocemos somos desconocidos para nosotros, nosotros mismos somos desconocidos para nosotros mismos; esto tiene un buen fundamento. No nos hemos buscado nunca, -¿cómo iba a suceder que un día nos encontrásemos? Con razón se ha dicho: <>; nuestro tesoro está allí donde se asientan las colmenas de nuestro conocimiento” [1]. “Aquel día crucé entre ansiedad y miedo el umbral, aquel día una vida quedaba afuera y era otra la que nacía-moría y nacía- Hoy miro con nostalgia y asombro-con miedo y abandono, esto que creo conocer y desconozco”. Por: Armando Henao Velarde. LA METÁFORA DEL TORNASOL El diccionario define lo “tornasol” como un girasol compuesto, como un reflejo; un viso. El girasol-se define como una planta de grandes flores amarillas que siempre miran al sol. Esto produce reflejos y visos, sombras y matices de colores. Pensar en escribir sobre algo que se llame “hombres”, significa pensarlo desde cierta mirada, desde cierta luz; intentar mirar sus visos, sus reflejos, las sombras y los matices. No puedo llamar a este momento “hombre” en singular porque le quitaría la riqueza de posibilidades y lo dejaría reducido. Como es muy elemental lo que digo, intentaré abrir el girasol y pensar los hombres como algo tornasol. El “estilo del mundo” de Vicente Verdú (2003) me hizo pensar en esta metáfora del tornasol. Pensar que nos encontramos en la era de las identidades móviles y mestizas. Pensar en los hombres de mi proyecto de investigación como hombres que transitan, juegan, se pelean y re-crean entre el sexo y el género, entre la identidad, la raza, la clase social. Unas identidades mestizas, hechas de pedazos y vueltas discursos, vueltas cuerpo-cristalizaciones que se rompen- y emergen nuevas formas de pensar lo qué significa ser hombre. Hombres que son y no son, que se tornan de un color y luego se difuminan. Hombres más cristalizados que otros, otros que no han podido darle la cara al sol y que el discurso de las ciencias sociales los mira como una totalidad-o peor aún no se ha dado cuenta de que existen-. ¿Qué significa ser hombre, qué significa hacerse hombre, qué significa eso del género, el sexo? Al parecer son algunos de los problemas en los que me he metido con esta investigación; problemas que intento esbozar preliminarmente para ir encontrando algunos posibles lugares y pistas desde las cuales seguir transitando. Interesa para este momento más que dar definiciones concretas, sí poner sobre el papel algunas de las principales luchas de interpretación y complejidades que implica pensarse el tema “hombres” como una categoría que no es clara, que no es transparente- que es importante abordarla desde sus distintas flores, desde la variedad de sus visos. El TORNASOL DEL GÉNERO: ENTRE LO MASCULINO Y LO FEMENINO: ¿Es posible pensar los hombres mirando desde un solo lugar? Partamos desde un malestar; un malestar y una denuncia que las mujeres y el feminismo han hecho; un mundo concebido varón. Simone de Beauvoir lo denuncia en su libro “El segundo sexo”. La idea central en su libro es que hay un prototipo de ser humano que es varón. La mujer es otro. Pero lo hegemónico es varón. Ahora bien, siguiendo a Beauvoir, cuando dice que la mujer no nace sino que se hace-¿aplicaría lo mismo para el hombre? Es aquí donde las primeras preguntas cobran interés: ¿qué es eso del sexo, qué es eso del género?. Para intentar ubicarme en estas preguntas deseo poner a continuación dos ideas que me parecen claves desde la perspectiva en Scott: “el género pasa a ser una forma de denotar las construcciones culturales, la creación totalmente social de ideas sobre los roles apropiados para mujeres y hombres. Es una forma de referirse a los orígenes exclusivamente sociales de las identidades subjetivas de hombres y mujeres[2]. Desde este primer planteamiento, el género permite dar cuenta de la construcción social por la cual se apropian roles, prácticas, conocimientos y formas de ser hombre-mujer ¿Funcionaría entonces como un “dispositivo” que posibilita las construcciones sociales y simbólicas? Si esto es así- el hombre no nace-también al igual que la mujer- se hace. El punto de partida desde el cual arrancan la mayoría de los autores para plantear el asunto del género es el de la biología-los hombres tendrán pene- y las mujeres clítoris. Los órganos genitales del hombre serán externos y los de la mujer internos. Aquí se da un primer matiz, el del sexo biológico. Sin embargo, esta primera distinción va a hacer compleja de sostener a partir de otros visos que se plantean. El género como construcción desde la cual “atrapar” la vida de los sujetos y sus prácticas provee de un repertorio de ser hombre y un repertorio de ser mujer. El siguiente planteamiento de Scott, propone mayor complejidad sobre el asunto. "El género es un elemento constitutivo de las relaciones sociales fundadas sobre las diferencias percibidas entre los sexos; y el género es un primer modo de dar significado a las relaciones de poder. (…) Como elemento constitutivo de las relaciones sociales fundadas sobre las diferencias percibidas, el género implica cuatro elementos: 1º - Los símbolos culturalmente disponibles que evocan representaciones simbólicas 2º - Los conceptos normativos que ponen en evidencia las interpretaciones de los símbolos, que se esfuerzan para limitar y contener sus posibilidades metafóricas 3 º - La construcción a través del parentesco, la economía y la organización política 4º - La construcción de la identidad subjetiva Culmina diciendo: "el género es un primer campo, a través del cual, en el seno del cual, o por medio del cual, el poder es articulado." Para Gabriela Castellanos el poder tiene cuatro ejes en los cuales se concentra[3]: a) Clase social, b) género, c) raza, d) generacional (por edad). Pensar en mi proyecto de investigación sobre las Casas de Baño implicaría revisarlo como un escenario de juego de lo masculino – en el cual ocurren luchas simbólicas- por sostener y mantener una idea de ser hombre y un repertorio hegemónico; a la par se re-inventan nuevas formas, se juega y se establecen nuevas luchas de poder muy posiblemente desde los cuatro ejes propuestos. La perspectiva de género sería un lugar desde el cual pensar en mi investigación las relaciones de poder entre los hombres. Para Kaufman las situaciones de violencia generadas por los hombres son realizadas a través de una triada que funciona así: de los hombres hacia las mujeres y de los hombres hacia otros hombres. Pensar desde la perspectiva de género implica entonces pensarse las relaciones de poder, sumada a otras cuestiones como: identidad sexual, orientación sexual, estilos de género, sexo-genitalidad. Aunque este es un trabajo que habla sobre hombres y masculinidades, es decir, las relaciones entre hombres serían impensables en esta reflexión sin incluir el otro elemento de la triada-las mujeres- Desde la misma enunciación del título el proyecto de investigación habla de hombres. Sin embargo, estos hombres tienen una cierta orientación sexual- Digo una cierta orientación porque esta es una de las ideas que se pone en pugna- Gabriela Castellanos, establece la diferencia entre identidades de género y orientación sexual. La orientación sexual implica hacia dónde desplazo mi deseo. Para el caso de los hombres que visitan las casas de baño hay un deseo situado por otros hombres. Pero esto no implica que sea estático-por el contrario es denso- es móvil. La orientación sexual es uno de los visos y tornasoles que hay que mirar desde distintos lugares. Cuando se habla de masculinidades el imaginario cotidiano obedece a un tipo de producción de hombre que este produce: el hombre fuerte, duro, alto. Sin embargo, lo masculino no obedece sólo a un patrón hegemónico sino a masculinidades y voces que luchan y se posicionan desde un lugar u otro con relación a esta hegemonía. Mi interés para el proyecto de investigación, estaría ligado desde esta gran categoría en pensar y rastrear pistas que permitan mapear las formas sociales y las formas históricas por las cuáles los actores de mi proyecto han construido su idea de hombre y cómo ponen en juego y en pugna su orientación sexual. Cabe anotar que el mundo de las Casas de Baño para los hombres en Cali, son denominadas desde el género y la orientación sexual: Saunas Masculinos- Saunas Gays. Dejando como implícita en ambas que lo masculino se refiere a hombres y lo gay al tipo de oferta y de gusto de los usuarios prefieren. Para finalizar este aparte me parece importante plantear que no considero que lo masculino y lo femenino sean algo que transiten de una manera clara y definida, con límites precisos, por el contrario es una de las pugnas. ¿Dónde comienza y empieza el otro?, Su juego radica allí en la imposibilidad de aprehensión. Como categorías de análisis se pueden separar y desagregar, pero es importante constrastarlas a la luz de eso que llama Michel Maffesoli el “conocimiento ordinario”. Poder partir de la cotidianidad de los actores de la investigación para descubrir y dar cuenta de qué ven, huelen, saben, palpan y hablan los hombres cuando nadie los escucha. ¿Qué es lo masculino en un hombre, qué es lo femenino en un hombre? ¿Cómo un hombre llega a hacerse social y culturalmente hombre?. ¿DE QUÉ COLOR SON LOS HOMBRES? " Conoces alguna profesión en la que el género masculino no sea superior al femenino?, pregunta Platón a Glaucón. Y el mismo se adelanta a responder"No perdamos el tiempo en hablar de tejido y de confección de pasteles y guisos, trabajos para los cuales las mujeres parecen tener cierto talento y en los que sería completamente ridículo que resultaran vencidas"[4] En el aparte anterior intenté esbozar el tema del género y como el género implica una construcción social y cultural desde la diferenciación entre –ser hombre y ser mujer-. Abordar el tema sobre los hombres implicaría revisar sistemáticamente los discursos elaborados por lo menos desde cuatro lugares que identifico han bombardeo esta noción de ser hombre. Y han construido discursivamente y en las prácticas formas de ser hombre. El primero, los “women estudies”. Estos produjeron que se rompiera con la hegemonía de pensar las relaciones sociales, el mundo del conocimiento desde “el hombre”, dejar de pensar la “mujer” no como otro –homologable y diferenciable por oposición al hombre- sino como otro en cuanto a “universo” y autonomía. En esta medida las feministas y los estudios sobre la mujer, rompen con lo impensable, rompen con la hegemonía e implica re-pensar por primera vez lo masculino- implica revisar el material del mundo que parecía estar hecho sólo del universo masculino. Pensarlo como algo que domina y margina. Un segundo lugar desde donde pensar lo que significa ser hombre estaría hoy situado desde los “men estudies”. Es así, como los estudios sobre hombres y sobre lo masculino intentan re-pensar ese vacío e incertidumbre introducido por el feminismos y las mujeres. Desde aquí el hombre es pensado e interpelado. Sin embargo, pensar en la categoría hombre implica de cierta manera una nueva hegemonía-un hombre heterosexual-. Es allí donde los “gays estudies” interpelan nuevamente a esta categoría. La interpelan, le hacen preguntas. Es posible pensar a los hombres con orientación distinta a la hegemónica desde los “men estudies”, pero los “gays estudies” apuntan a construir un discurso que se pregunte por las particularidades de ser hombre desde esta orientación. Aparece entonces un lugar desde el pensar re-pensar lo anterior. Un lugar en el cual Judith Butler[5] es fuerte en sus concepciones. Aparece aquí la teoría sobre lo queer (lo rarito). Se plantea desde aquí los problemas de la enunciación. Lo que se enuncia invisibiliza a la vez; crea un nuevo tipo de cristalización. Esta vendría a ser una nueva ola que lucha por no dejarse “atrapar” desde la cristalización e intenta permanecer desde los bordes, desde lo innombrable. Sin embargo, sería importante revisar a profundidad si desde los bordes no terminan haciendo más de lo mismo. ¿Frente a la pregunta cómo se hace un hombre? Sería importante anotar que la orientación sexual no anula la idea de ser o dejar de ser hombre. La orientación sexual forma parte del gusto y también forma parte de la construcción social de ser hombre, como participan también la clase social, la raza. El hacerse hombre, como repertorio, como acciones y prácticas implica construirse desde por lo menos cuatro instituciones sociales: A) La familia. Esta distribuye de cierta manera unos roles y tareas. El rosado para la niña, el azul para el niño. Los oficios para las niñas, los deportes y el juego para los niños-en mayor proporción-. Es una forma de hacerse –hombre y hacerse mujer- desde la familia a pesar de los estudios y los discursos. ¿Qué implicaciones tiene la Barbie y Kent en la construcción social de hacerse hombre o hacerse mujer? ¿Qué implicaciones tiene el juego de ollitas, el kit de aseo que se le compra a algunas niñas para sus juegos? ¿Qué implicaciones tiene los guantes de boxeo, los guayos y el balón de fútbol en la construcción de hacerse hombre? Esto tendría que analizarse más detalladamente desde las otras categorías expuestas como la clase social, la raza, la religión, etc; pero me parece importante dejar esbozado como la familia como institución inicia y construye unos repertorios desde los cuales niños y niñas se construyen como hombres, como mujeres. ¿Qué tareas y actividades son asignadas en el juego de roles? Incluso en familias donde las mujeres tienen una tradición activista en el feminismo y los discursos de género, las tareas del hogar, de crianza, de compra, recaen con mayor fuerza sobre ellas. B) La escuela. Durante el seminario con Gabriela Castellano se comentaba como la escuela desde el mismo patio de recreo instaura estas distinciones: se encontraba en algunas instituciones que los niños ocupaban la totalidad del patio de recreo jugando al fútbol, mientras las chicas permanecen en los bordes, en los extremos del patio. Algunos de los estudiantes de uno de los cursos que dicto este semestre (febrero-junio) han encontrado en sus observaciones de campo que muchas de las escuelas establecen una diferenciación fuerte entre hombres y mujeres. En algunas instituciones se hace la formación diferenciada, en otras son distribuidos en el salón teniendo en cuenta esta característica y otras han distribuido los salones así: uno para niños y otro para niñas. La escuela enseña desde el aula, desde la interacción entre niños y niñas ciertas actividades que “son propias” de los niños y ciertas actividades que son propias de las niñas. Les dan ciertas atribuciones como por ejemplo, los niños son más violentos, más fuertes. Las mujeres son más amigables, más suaves. C) El trabajo. Algunos nos hemos visto en apuros cuando llenamos una hoja de vida y sólo está la casilla hombre o mujer. En algún momento hemos sentido el deseo de poner la X en la mitad, en los bordes.-Se es hombre, se es mujer-Todavía esto ni los estudios de género lo han podido resolver con exactitud. Históricamente algunas labores han sido destinadas para las mujeres y otras para los hombres. Desde los modelos de vida de H. Arendt[6], lo denominado “labores” estuvo históricamente asignadas a la mujer. Primero, en la casa y luego en el trabajo. El esclavo era designado para las tareas de “trabajo” y el “hombre” era destinado para “la vida activa”, para pensar y hacer política. La vida social y el trabajo suponen entonces distinciones de modos de vida necesarios. Tipos de trabajos diferenciados. Entonces hay trabajos que están liberados de la labor (de las manos) y otros liberados de esclavitud (sudor, fuerza física). La vida activa estaría ligada a los hombres quienes tendrían el don de la palabra y la búsqueda del bien común. Estos planteamientos permitirían entender las fuertes luchas que han dado las mujeres y el feminismo para intentar romper esta hegemonía. En la actualidad algunos trabajos siguen siendo en mayor proporción de hombres. Y otros son en mayor proporción de mujeres. Es por esa razón que existe la “Ley de cuotas” para las mujeres, la cual busca garantizar que esta situación no sea tan inequitativa- en el caso donde las mujeres son discriminadas. Los hombres y las mujeres construyen su carácter desde este lugar-el del trabajo-, el de la subjetividad, un imaginario de lo que implica ser mujer y ser hombre. Quiénes no cumplen con estos formatos y se ubican en los centros, o en los bordes; muchas veces son objeto de discriminación. Muchos de los hombres que visitan las Casas de Baño instauran su condición de hombre o reivindican su condición de hombre-gay desde su trabajo. Se es policía, obrero, Fisiculturista, futbolista, técnico. O se es: estilista, enfermero, contador, médico. D) La recreación. Qué hacemos cuando no estamos en el trabajo, cuando no estamos en la escuela, cuando nuestros padres no están en casa. Muy posiblemente buscamos una forma de re-crearnos- Encendemos la tele, vamos a un cine, a un parque. ¿Qué nos quieren decir los recreacionistas de nuestras fiestas infantiles cuando nos preguntan quienes son mejores -las niñas o los niños-? ¿De qué nos hablan nuestros programas de tele? ¿Qué aprendemos en el hombro a hombro cuando jugamos un partido de fútbol? Qué tiene que decirnos la revista “tú” sobre como ser niña, cómo ser sexy” O que nos dice Mens Healt sobre el tipo de cuerpo que debemos tener:cuántas eyaculaciones al día, cuánto debe durar nuestra erección, cuánto es un tamaño de pene normal? ¿Qué significa nuestro cuerpo y nuestros ojos frente a la pantalla de cine viendo el cuerpo de Terminator 1, 2, 3. Qué aprendimos los que vimos legalmente rubia….De qué nos hablan las tiendas de disco, de ropa, de qué nos habla el entretenimiento?. ¿Por qué las niñas enferman de bulimia y anorexia, por qué los hombres inflan sus cuerpos? ¿Por qué nos preocupa tanto el tamaño del pene? ¿Por qué las niñas piden con mayor frecuencia un aumento de seno como regalo de quince? Qué significa ser gay desde Caracol o RCN. Por qué Queer as Folk[7] nos hizo sentir que por primera vez nuestra vida de hombres y mujeres con opción distinta a la hegemónica era mostrada a través de una serie al igual que Clase de Beverly Hills, Friends, Comando, Melroplace. ¿De qué nos reímos y aprendemos en los chistes sexistas? Creo que me he extendido en las preguntas, pero me parece importante pensar este escenario social- el de la recreación y entretenimiento- desde el cual se construyen formas sociales de vivir y experimentar ser hombre o mujer. El escenario de la recreación, el escenario del entretenimiento; es también a mi modo de ver un lugar que participa activamente de esta construcción. TIPOS DE HOMBRES: LOS HOMBRES TORNASOL Me parece importante en este momento intentar cruzar algunas cosas para ver la gama de girasoles y posibilidades desde las cuales pensar las formas de ser hombre... A partir de la experiencia de la “Casa de Baño” he intentado identificar cuatro tipos de hombres-pueden haber muchos más- pero estos cuatro tipos de hombres de cierta manera intentarían abordar los cuatro tipos de discursos desde los cuales pensarlo; al mismo tiempo que desde los cuatro tipos de instituciones y escenarios desde los cuales se hacen. Estos tipos de hombres son: A) Los hombres duros. Aquí estarían fuertemente los hombres cuyo discurso es construido desde la hegemonía heterosexual. Desde estos discursos funcionaría con mayor eficacia LO ACTIVO. Se encuentran con otros hombres pero su discurso y sus prácticas reproducen el tipo de violencias de los hombres heterosexuales. Hay una hipervirilidad. El tamaño importa, el tiempo importa, la dureza importa. Hay una preocupación cuantitativa frente a las prácticas y los imaginarios. Aquí el cuerpo es un cuerpo acabado. Con un forma específica, con implementos que exacerben esta condición. B) Los hombres blandos. Se construyen por oposición al anterior y con referencia a las prácticas y discursos asignados a lo femenino y a la mujer. Aquí de cierta manera también se asume un tipo de hegemonía, la hegemonía heterosexual desde el matiz de la mujer, lo delicado, lo blando, LO PASIVO, serían algunas de las metáforas que operarían. Hay una “feminización” del cuerpo. Es un cuerpo que también intenta ser acabado por oposición al anterior. C) Los hombres queer. Su campo de lucha se pelea entre el A y B e intenta ubicarse desde “un no lugar”, un lugar C. El de la no definición, el del cuerpo inacabado qué puede ser y no ser. El cuerpo que se desplaza. LO PASIVO Y LO ACTIVO NO SON CLAROS. Lo duro y lo blando pueden habitar el mismo cuerpo y las formas de hacerse hombre...Hay una ruptura con los discursos hegemónicos. A pesar de que es muy posible de que se cree una nueva hegemonía. D) Los hombres obscuros. Los hombres obscuros son aquellos donde el tornasol no alcanza plenamente la luz del sol. Donde las ciencias sociales tal vez no mira mucho. Son tal vez muchos de los hombres cotidianos que poco les interesa ser duros, blandos, queer... Tal vez estos hombres no se desplazan, no se cristalizan, tal vez hacen “surfing”[8]. Aquí mis líneas son menos que las anteriores, aquí soy menos preciso…. Ahora bien, esta escritura me deja un gran interrogante: ¿cómo cruzar estos tres ejes que propongo que permiten construir las “formas sociales e históricas de ser hombre: Cómo cruzar estos tres ejes: Eje 1: Discursos: women estudies, men estudies, gays estudies, queer estudies. Eje 2: Instituciones-Prácticas sociales: Familia, Escuela, Trabajo, Recreación Eje 3: Tipos de Hombres que emergen: Hombres duros, Hombres blandos, Hombres queer, Hombres obscuros. También me quedan como preguntas: ¿cómo operan la raza, la clase social, lo generacional en la construcción las formas de ser hombre?.- Es necesario integrarlas a mi estudio, cómo? [1] Nietzsche, Friedrich (1984). La Genealogía de la Moral. Traducción de Andrés Sánchez Pascual. Madrid: Alianza Editorial [2]Scott, J: “El género, una categoría útil para el análisis histórico”, Ed. Alfonso el Magnanim, Valencia, 1990 [3] Notas tomadas durante el seminario: Discurso e identidades de Género. Febrero-Junio de 2007 [4] Platón, La República. [5] Autor que está pendiente por trabajar en el curso. [6] Estas citas no son rigurosas son notas tomadas a partir del Seminario tomado con el profesor Carlos Cullen, mayo de 2007. [7] Serie que estrenó HBO PLUS, en el año 2001 y trataba de la vida de un grupo de amigos gays y una pareja lesbiana que contaban sus amores, desamores y como transcurría su vida en Babilonia; la discoteca a la cual iban casi todos los días. [8] Esta noción la propongo de manera intuitiva y tendría que revisar de nuevo como es usada en el libro Cuerpo Joven de los profesores: Rocío Gómez y Julián González.